Bueno me es haber sido humillado, para que aprenda tus estatutos.”
Salmo 119:71
By Pastor Juárez
Nosotros no vemos como los propósitos de Dios son frustrados y demorados por la rebeldía humana. La herencia del pecado de Adán, que está en el soma natural humano, nos hace con gran fuerza desobedecer la Palabra de Dios. Producto de esa desobediencia vivimos humillados, sin poder en lo que hacemos ya sea en la vida secular o en nuestra vida espiritual y vamos a tener fallos y tropiezos, pero dependiendo de nuestra actitud definiremos de que estamos hechos.
Como desea usted vivir su vida, aprendamos de nuestros errores y vivamos la vida que Dios quiere, una vida obediente para su obra. Reconocer y hablar de lo que nos ocurre nos permite examinarlo, compartirlo; con otros nos permite, continuar avanzando en un proceso de aprendizaje continuo. Debemos reconocer nuestro error con humildad y apreciar las cosas como nos vienen. Nos salió mal, por que estamos mal, pero podemos cambiarlo.
Pidamos al Espíritu Santo que nos ayude a caminar en obediencia a Dios, para honra y gloria de Él.