By pastor Juárez
La vida está llena de dificultades y catástrofes inesperadas que son una buena razón para que las personas experimenten depresión y tristeza. La Palabra de Dios nos da métodos para paliar ante las dificultades y sufrimientos y superar el sentirse ansioso y sufriente. El apóstol Pedro en su primera carta, en el capítulo cinco, versículo siete dice: “…echando toda vuestra ansiedad sobre El, porque él tiene cuidado de vosotros.”
Depende como enfrentes cada situación caótica de tu vida, marcará diferencia; si dejas que la tristeza se apropie de tu corazón, puedes quedarte atrapado en las garras de la ansiedad y la depresión. El Señor Jesús nos ofrece consuelo para esos momentos y nos hace ver que estas cosas son pasajeras. Al soportar la dificultad sin renunciar a Dios, demostramos a la gente, al mundo y a Satanás, que la luz de la palabra es más poderosa y hacernos capaces de vivir una vida feliz con él. Nos demuestra que es soberanamente poderoso, sabio y bueno y que él mismo tomó nuestro sufrimiento.
Persevera en la oración, el estudio de la Biblia y la comunión con otros creyentes.