By pastor Juárez
Yo iré delante de ti, y enderezaré los lugares torcidos.
Isaías: 45:2
Confiar en Dios resulta algunas veces difícil, incluso hasta el Hijo de Dios. No obstante el momento en tomar una decisión, cuando estamos en una adversidad, se nos hace más difícil confiar en Dios. Si alguno de ustedes se encuentra enredado en alguna dificultad y no encuentra salida, debe ver a aquel que tiene perfecta sabiduría y permita que ese enredo pase a las manos de él, lo que es imposible para usted, para él es perfectamente posible, porque es poderoso.
La confianza de que nuestro problema está bajo el control de un Dios Todopoderoso y amoroso es diferente a querer arreglar mi problema por mí mismo. Nuestro sufrimiento tiene un propósito y un significado en el camino de Dios, lo permite porque es para su gloria y para nuestro bien. Hay un hecho que se repite una y otra vez en las escrituras es que Dios nos ama y envió a su Hijo Cristo a la cruz donde mostró su amor perdonando nuestros pecados.
Confía en Dios, ten fe.