acerquémonos con corazón sincero, en plena certidumbre de fe, purificados los corazones de mala conciencia, y lavados los cuerpos con agua pura
Hebreos 10:22
By pastor Juárez
Que gran privilegio que tenemos por medio de la sangre de nuestro Señor Jesucristo acercarnos al creador, no podemos permanecer distantes sería una ofensa para El. He oído hablar de un célebre rey de Polonia, que consumó grandes hazañas. Cuando le preguntaron cuál era el secreto de su éxito, les dijo: “Soy hijo de un gran padre, y llevo siempre conmigo, en un medallón, su retrato. Muy a menudo lo miro”. Cada vez que se disponía a entrar en combate miraba el retrato de su padre y extraía de él el valor necesario. Cuando tenía que reunirse con sus consejeros hacía lo mismo y luego actuaba con limpieza.
Es una gran cosa que debe hacer el creyente: llevar consigo la voluntad de Dios en el corazón y luego, antes de hacer cualquier cosa, consultarla siempre. Esta es la verdadera adoración que nace de un corazón sincero, con un propósito franco, basado en la preciosa sangre de Cristo, y confiar en ese poder justificador.
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