Y he aquí, yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo
Mat. 28:20
By Pastor Juárez
Nuestras vidas se reubican en posición correcta cuando el Espíritu nos une a Jesús a través de la fe. «nos libró del dominio de las tinieblas y nos trasladó al reino de su Hijo amado» (Col. 1:13).
Jesús y Sus discípulos no podían estar separados por la distancia entre el mundo y los reinos celestiales. Si no podemos estar personalmente en la batalla, no debemos desalentar a los que están combatiendo. Un jefe de la tribu de los escoceses cayó en la batalla de Sheriff-Muir. Cuando sus soldados vieron caer al jefe, vacilaron un momento, dando una gran ventaja por ello al enemigo. El viejo caudillo al ver lo que acontecía, se incorporó y aunque la sangre manaba de sus heridas, gritó: –No estoy muerto, hijos míos. Os estoy mirando, y espero que cada uno cumpla con su deber. Estas palabras sirvieron de estímulo a los soldados, llevándolos a hacer esfuerzos casi sobrehumanos. Así, cuando nuestras fuerzas flaquean y nuestros corazones están apesadumbrados, el Capitán nos dice: “He aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo.” Por D.L. Moody
Él Señor Jesús está con nosotros de manera más profunda porque por el Espíritu estamos en Cristo. El estar con Jesús es el fundamento de una nueva vida para nosotros.
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Gloria a Dios. Bendiciones hermana.
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