Le dijeron, pues, los otros discípulos: Al Señor hemos visto. Él les dijo: Si no viere en sus manos la señal de los clavos, y metiere mi dedo en el lugar de los clavos, y metiere mi mano en su costado, no creeré.”
Juan 20:25
By Pastor Juárez
Hay una tendencia en el humano de ver para creer. El apóstol Tomás personifica a quienes, llamándose creyentes, se mueven para el principio de ver para creer. Debemos creer para ver la salvación en Cristo.
En el mundo las personas piensan de esa manera, ellos quieren decir que tienes que ver la prueba de algo antes de que puedas creer. Puede ser verdad en el mundo. Pero no es verdad en el mundo espiritual. Es todo lo contrario, tienes que creer para poder ver. Por nuestra condición pecadora no podemos ver el Reino de Dios, nuestro Señor está en el Reino Espiritual. Debes creer en él y ser regenerado primero. ‘El que en él cree, no es condenado’. ‘El que en él cree, tiene vida eterna’. La fe verdadera descarta a la lógica humana. Dios quiere que tengamos una fe de creer para ver.
Si creemos en la promesa de Jesús es creer para ver.
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