Cuán dulces son a mi paladar tus palabras Más que la miel a mi boca.”
Salmo 119:103
By Pastor Juárez
Cuando satanás tentó a Jesús en el desierto, Él lo venció con las palabras: Escrito está. En otra ocasión los fariseos trataron de ponerle una trampa, pero les respondió con la Palabra de Dios para mostrarles su error: ¿Qué dice la escritura?
Todo el ministerio de Jesús se ve involucrado con el uso de la Palabra de Dios. La Palabra de Dios fue su guía. La meta de Dios al darnos Su Palabra escrita fue para que fuésemos alimentados. Jesús dijo: «Las palabras que Yo os he hablado son espíritu y son vida»3. La Palabra es la vida misma de Dios. Es lo que nos proporciona vida, sustento, fuerza y salud espiritual. Jesús es la Palabra, el Espíritu y la vida. Cuando nos alimentamos de la palabra que sale de la boca de nuestro Señor y Salvador sufriremos algunos cambios que son para bien, de la misma manera en que normalmente, comemos alimentos naturales, debemos también así alimentar nuestra alma con el alimento de Dios que es su Palabra.
Comienza ahora a alimentarte de su palabra y serás fuerte en la fe, lleno de bendición de Dios y viviendo en victoria.