Hijitos míos, no amemos de palabra ni de lengua, sino de hecho y en verdad.”
1 Juan 3:18
By Pastor Juárez
No importa quien lo diga, pero cuando escuchamos la verdad en labios de otra persona sincera que nos dice algo que no queremos escuchar nos incomoda. La verdad es una realidad, es una realidad objetiva.
La estratégica pregunta de Pilato nos plantea una temática a nivel universal. ¿Qué es la verdad? Se detecta la verdad en el evangelio, porque es la verdad y para tenerla tenemos que compartir con Jesús, compartir el evangelio. Porque con esta verdad debemos ir caminando de acuerdo con el valor de lo que se dice y se hace. Es decir, si digo haber aceptado a Cristo como mi salvador y por consecuencia haber creído en Él, debo ser ejemplo y tener una buena conducta ante toda la sociedad que me está rodeando, para que de esa manera demuestre no sólo con palabras sino con hechos que realmente fui llamado dentro del Reino de los cielos. Porque quienes viven en el reino de Dios el salmista nos dice: El que anda en integridad y hace justicia, Y habla verdad en su corazón. El que no calumnia con su lengua, Ni hace mal a su prójimo, Ni admite reproche alguno contra su vecino. Salmo 15:2-3 RVR 1960
No todos los que dicen tener una buena conducta realmente lo son, si queremos ser personas que podamos demostrar que somos honestos e intachables dentro de una sociedad y de esa manera se nos abran puertas, debemos ser practicantes de la verdad de Dios en todo momento. Y esta verdad no es más que hacer el bien a las demás personas, es hacer la voluntad de Dios. Debemos ser, hombres de honra e intachables para no avergonzarnos de actitudes cometidas y que nos incomoden.