Ha caído Babilonia Después de esto vi a otro ángel descender del cielo con gran poder; y la tierra fue alumbrada con su gloria. Y clamó con voz potente, diciendo: Ha caído, ha caído la gran Babilonia, y se ha hecho habitación de demonios y guarida de todo espíritu inmundo, y albergue de toda ave inmunda y aborrecible. Porque todas las naciones han bebido del vino del furor de su fornicación; y los reyes de la tierra han fornicado con ella, y los mercaderes de la tierra se han enriquecido de la potencia de sus deleites.
Apocalipsis 18:1-3
Pastor Juarez
Notas de sermón:
(John Macartha) A lo largo de la historia los reinos e imperios construidos por los rebeldes, orgullosos, arrogantes y aborrecedores de Dios, han llegado y se han ido. El espíritu de humanismo que se manifestó primeramente en Babel, ha calado la historia humana desde entonces. De tal manera que ha tomado control (como ellos piensan) de su propio destino mediante la ciencia, Dios no tiene utilidad alguna para los pecadores, que arrogantemente lo remplazan por dioses según su propia imaginación, dedicados a su propia soberanía. Este ángel que desciende del cielo es portador de la gloria de Dios, y es tal el resplandor que alumbra la tierra, también se nos dice que viene con gran poder. Este ángel a gran voz anuncia la caída de la gran Babilonia, la expresión “se ha hecho habitación de demonios, de todo espíritu inmundo y de toda ave inmunda y aborrecible” indica que el centro político y comercial del mundo (Babilonia) será destruido y más bien se tornará en una morada para los poderes demoniacos.
El pecado de Babilonia no sólo es la idolatría y las prácticas hechiceras, sino también el orgullo, la codicia y las riquezas mal adquiridas y no rendidas a Dios.
En nuestro tiempo están sucediendo muchas cosas en la iglesia del Señor en todo el mundo, y hay señales que se están activando en el planeta y en medio de la iglesia, por eso el creyente debe discernir los tiempos. Pues no todo lo que pasa en la iglesia, viene de Dios. Debemos oír lo que es de Dios. La Babilonia del Antiguo Testamento y el Nuevo Testamento compartieron una caída común. La adoración de ídolos fue su principal pecado. Babilonia se idolatraba a sí misma y no reconoció ni glorificó a Dios de ninguna manera. Esto no es diferente de hoy. Estamos constantemente consumidos por múltiples ídolos que desvían nuestro enfoque de Dios. La adoración de ídolos conduce a la inmoralidad cuando estamos tan consumidos por la adoración de otros dioses en lugar del único Dios verdadero.
I. SIRVIENDO A OTROS DIOSES.
Apocalipsis 18: 7 Cuanto ella se ha glorificado y ha vivido en deleites, tanto dadle de tormento y llanto; porque dice en su corazón: Yo estoy sentada como reina, y no soy viuda, y no veré llanto;
Babilonia creía que eran la mayor superpotencia del mundo. Tenían todo lo que necesitaban. No confiaban en nadie ni en nada, sino que adoraban su propia grandeza.
(Comentario Biblia Plus) ¿Cuánto – es decir, en proporción a.
Vivió deliciosamente, lujosamente (nota, Apocalipsis 18:3 ).
Tristeza , [ penthos ( G3997 )] – ‘luto’, como por un esposo muerto.
Lo es. Entonces Vulgata; pero ‘Aleph (‘) prefijo ABC ‘eso’.
Yo… no soy viuda, porque el poder mundial es mi esposo.
Y no verá tristeza – ‘luto’. ‘Estoy (mucho) sentado… No soy viuda… No veré dolor’, señala su seguridad despreocupada en cuanto al pasado, presente y futuro (Bengel). Nunca tendré que llorar como alguien privado de marido. Porque se encuentra en Muchas aguas, personas, multitudes y naciones y lenguas; Sin embargo, por mucho tiempo, como la antigua Babilonia, ella no tendrá hombres en ella, sino que serán habitados por demonios, espíritus sucios y pájaros odiosos: (COMENTARIO BÍBLICO DE JOHN GILL) aquí vemos cómo Dios la ve y que Él destrona este sistema en Su juicio. Un ángel fuerte desciende para anunciar su perdición y dejar al descubierto su corrupción interior y más terrible. Un fuerte ángel descendente cuya gloria iluminó la tierra, muestra en qué se ha convertido la cosa jactanciosa, ella, que llevó el bendito nombre de Cristo. (comentario de Biblia Plus)
(Este ángel puede representar al Señor mismo. Si esto es correcto, tenemos la tercera manifestación de nuestro Señor en el atuendo de un ángel: 8: 3 en Su dignidad sacerdotal; 10: 1 en Su dignidad real y aquí como el heraldo y albacea. de la venganza de Dios sobre Babilonia). Se la ve como la habitación de los demonios. Incluso ahora, detrás de todas las negaciones de la doctrina de Cristo y las falsas doctrinas que marcan la marcha hacia adelante de la apostasía predicha, los demonios son los líderes (1 Timoteo 4:1). Pero el Espíritu dice claramente que en los postreros tiempos algunos apostatarán de la fe, escuchando a espíritus engañadores y a doctrinas de demonios;
Apocalipsis 18: 14-17 Babilonia se vistió de lujos y riquezas. No necesitaban a Dios ni a Su provisión. Amasaron una abundancia; nunca honrar a Dios ni preocuparse por las necesidades de los demás. Babilonia, en todas sus partes, está representando todo aquello que Cristo llamó “el mundo”. (Barnhouse) «Al retratar la destrucción de una ciudad (simbólica), él describe el juicio de Dios sobre el gran sistema satánico de la maldad, el cual ha corrompido la historia de la tierra». (Johnson) «En el capítulo 18, el contexto parece indicar que aquí Babilonia es vista en su carácter político y económico, en lugar de en su aspecto religioso». (Walvoord)
Apocalipsis 18: 3 : Babilonia tenía la adoración de todas las naciones que la rodeaban. Todos querían lo que tenía Babilonia y no podían ver la inmoralidad y el pecado en el que se estaban entregando. Dios puede tener pueblo hasta en Babilonia. Pero el pueblo de Dios será llamado a salir de Babilonia, y llamado eficazmente, mientras que los que participan con los impíos en sus pecados, deben recibir sus plagas. (Comentario Bíblico de Matthew Henry) Es inconcebible que un hijo de Dios pueda ser parte de la Babilonia religiosa (aunque podrían meterse algunos elementos). Pero la Babilonia comercial, con su señuelo material, es una amenaza constante de la cual se deben de cuidar. (Enduring Word)
Y continúa: El llamado para apartarse de Babilonia, y del mundo que esta representa, es un tema que se repite frecuentemente en las Escrituras:
i. «Apartaos, apartaos, salid de ahí, no toquéis cosa inmunda; salid de en medio de ella; purificaos los que lleváis los utensilios de Jehová» (Isaías 52:11).
ii. «Huid de en medio de Babilonia, y salid de la tierra de los caldeos» (Jeremías 50:8).
iii. «Salid de en medio de ella, pueblo mío, y salvad cada uno su vida del ardor de la ira de Jehová» (Jeremías 51:45).
iv. «No os unáis en yugo desigual con los incrédulos; porque ¿qué compañerismo tiene la justicia con la injusticia?» (2 Corintios 6:14).
v. «Y no participéis en las obras infructuosas de las tinieblas, sino más bien reprendedlas» (Efesios 5:11). Ni recibáis parte de sus plagas: La advertencia está enfocada hacia los santos que están en la posición que se le dio a Lot mientras vivía en Sodoma (Génesis 19). Esto se refiere al pueblo de Dios habitando en un lugar en el que no debe de estar, un lugar señalado para la destrucción.
Apocalipsis 18:23 – Babilonia engañó a quienes los adoran al permitirles creer en su grandeza cuando estaban llenos de pecado e inmoralidad. Igual que en la antigua Babilonia:
Dios habló por medio de Daniel y les dijo lo que Dios estaba tratando de decirles a través de ellos.
Daniel 4:27 : Por tanto, oh rey, acepta mi consejo: tus pecados redime con justicia, y tus iniquidades haciendo misericordias para con los oprimidos, pues tal vez será eso una prolongación de tu tranquilidad.
Nabucodonosor adoró su propia grandeza. Ordenó al pueblo de Babilonia que se inclinara y adorara una estatua de oro que él creó. Daniel le dijo al Rey que se apartara de sus pecados e hiciera lo correcto. El rey fue destituido por siete años y su reino le fue quitado. Fue humillado y alabó a Dios por apartarlo de sus pecados.
Pedro nos dijo: Arrepentíos, y bautícese cada uno de vosotros en el nombre de Jesucristo para perdón de los pecados; y recibiréis el don del Espíritu Santo. Hechos 2:38
Daniel 5:23: sino que contra el Señor del cielo te has ensoberbecido, e hiciste traer delante de ti los vasos de su casa, y tú y tus grandes, tus mujeres y tus concubinas, bebisteis vino en ellos; además de esto, diste alabanza a dioses de plata y oro, de bronce, de hierro, de madera y de piedra, que ni ven, ni oyen, ni saben; y al Dios en cuya mano está tu vida, y cuyos son todos tus caminos, nunca honraste.
El rey Belsasar adoró su riqueza. Usó artículos robados del templo en Jerusalén para sus fiestas personales y los profanó. Alabó su riqueza en plata y bronce. Belsasar nunca reconoció ni honró al único Dios verdadero por toda su prosperidad. Daniel dijo que no «honraba al Dios que tiene en su mano tu vida y todos tus caminos».
Cuando tenemos abundancia, no siempre confiamos en Dios para su provisión. Olvidamos que a través de Él tenemos todo lo que necesitamos y la mano de Dios está sobre nuestras vidas.
Mientras Babilonia sea destruida, aquellos que han compartido su maldad y moralidad también lamentarán su destrucción. Después de la caída de Babilonia, se llevará a cabo una gran celebración en el cielo. Todos adorarán a Dios, regocijándose y agradeciéndole por su fidelidad. Satanás finalmente será derrotado. Nos recuerda lo que Jesús dijo en Mateo 18:6: «Y cualquiera que haga tropezar a alguno de estos Jesús le hace a usted en este momento, este día es de decisión, ahora es el día de salvación. Pequeños que creen en mí, mejor le fuera que se le colgase al cuello una piedra de molino de asno, y que se le hundiese en lo profundo del mar». Esto aplica a Babilonia en Apocalipsis 18, porque ella condujo a otros a pecar. Es una cosa terrible pecar por ti mismo; pero es más terrible conducir a otros a pecar. Algún día, el sistema de este mundo pasará, como una gran roca que cae en el fondo del mar.
¿nos dolerá esta caída? Nos herirá solamente en la medida en que nos hayamos sumergido en la mentalidad de la Babilonia comercial y del mundo.
Si no ha entregado su vida a Cristo lo invitamos a que lo haga hoy, esta es la invitación que
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